
«El Comienzo del Tiempo» de Bernardo Arellano, se llevó el premio Tiantan (Templo del Cielo en español) como la mejor película de la quinta edición de Festival Internacional de Cine de Beijing, el cual se clasusuró este jueves.
Al recoger el premio en la ceremonia realizada en la sala Yanqi, en Beijing la capital de China, el director Bernardo Arellano expresó su agradecimiento al jurado por obtener el reconocimiento más importante del festival.
La producción mexicana compitió junto a otras 14 películas internacionales, que previamente habían sido seleccionadas de entre mil producciones provenientes 90 países.
El premio para mejor director lo obtuvo el francés Jean-Jacques Annaud con la historia épica «Wolf Totem» , la cual también se impuso en los mejores efectos especiales.
El Tiantan al mejor actor se lo llevó Artem Tsypin por la cinta rusa «A White, White Night»; mientas que Yuliya Peresild tomó el premio como mejor actriz en «The Battle For Sevastopol» una coproducción Rusia-Ucrania.
La mejor fotografía fue para la película eslovaca «Children» de Jaro Vojtek y la mejor música quedo en manos de la producción alemana «Gruber Geht».
También participó la colombiana «El silencio del río» de Carlos Tribiño, que junto con la mexicana fueron las dos únicas películas hispanoblantes seleccionadas para la competencia, sin embargo, esta cinta no logró ningún galardón.
En opinión del presidente del jurado, el cineasta francés Luc Besson, el Festival de Beijing, pese a su juventud, ya se sitúa como uno de los más importantes del mundo.
El jurado de la selección oficial Tiantan estuvo compuesto por Luc Besson, cineasta francés; Fyodor Bondarchuk, actor ruso; Petar Chan, director de Hong Kong; Robert Mark Kamen, guionista estadounidense; Ki-duK Kim director y guionista surcoreano; Fernando Meirelles, cineasta brasileño y Zhou Xun actriz china.
El director
Bernardo Arellano estudió en el Centro de Capacitación Cinematográfica del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes de México.
«El Principio del TIempo» este es su segundo largometraje. Debutó en 2011 con la cinta «Entre el Día y la Noche», con el cual ganó el premio a la mejor Ópera Prima en Festival de Guanajuato.
En 2008 el directo mexicano se hizo acreedor al premio al Mejor Cortometraje Documental en el Festival Internacional de Cine de Morelia con su cinta Zogoocho.
La historia
«El Comienzo del Tiempo» se concentra en Antonio y Bertha una pareja de ancianos cuyos problemas inician cuando el gobierno suspende el pago de pensiones debido a la crisis económica.
Al perder su única fuente de ingresos y con un usurero que los visita para cobrar la deuda que adquirió su hijo, a quien no ven desde hace más de 10 años, la pareja pasa por una situación extrema para subsistir, que los lleva a robar alimentos en una tienda, deshacerse de sus pertenencias y vender tamales en la calle.
Inesperadamente, los ancianos se encuentran con su hijo Jonás y con Paco, su nieto a quien no conocen. Jonás promete ayudarles y deja que viva con ellos Paco, quien está desempleado. Bajo esta situación, la vida de los personajes se trastoca por la convivencia del joven con sus abuelos y con los demás ancianos que forman el círculo de amigos de Antonio.
«El comienzo del tiempo» es un homenaje a las personas de la tercera edad que han sido abandonadas por sus familias, ya que muestra la solidaridad que se teje entre los ancianos y su voluntad de vivir pese a las enfermedades que les aquejan, los sentimientos de soledad que les afligen, y una depauperada situación económica que les pone al borde de la pobreza.
Los actores
El tema del abandono es universal y no sólo se localiza en México, dijo en entrevista el día del estreno de la cinta en el festival Francisco Barreiro, quien interpreta al nieto Paco.
“Para mí, como intérprete, hacer este papel significó voltear a ver a la gente de la tercera edad, a la que no estás acostumbrado a ver, y darle su lugar como un grupo importante de la sociedad”.
Barreiro comentó que salvo su personaje y el del padre Jonás, interpretado por José Sefami, el resto del reparto no son actores profesionales.
Bernardo Arellano encontró a los actores en un centro recreativo para personas de la tercera edad en la Ciudad de México.
El personaje principal, Antonio, fue encarnado por Antonio Pérez Carbajal, quien tenía 93 años de edad al momento en que se filmó la película, hace dos años. En la vida real vendía carpetas que él mismo tejía porque no le alcanzaba el dinero de su pensión. Actualmente, Antonio Pérez se encuentra delicado de salud, según refiere Barreiro.
“Toño ya pensaba que su vida era hacer carpetas y de pronto se topó la oportunidad de ser el protagonista de una película cuando él jamás se imaginó serlo. Recuerdo perfectamente la gratitud y la fascinación que él tenía de saber cómo funcionaba el cine después de 93 años de vida”, comentó Barreiro que guarda dos carpetas que le regaló Antonio durante la filmación.
De hecho, las carpetas que se muestran en la cinta son las que él mismo tejió, agregó.
Para Barreiro hacer el papel del nieto le implicó involucrarse personalmente, ya que no conoció a sus abuelos, quienes fallecieron cuando tenía 4 años.
“Me encuentro con esta película y con esta gente mayor de 90 años, que sus hijos en la vida real los han abandonado, y me encariño de una manera brutal con ellos, sobre todo con Bertha y Toño (los personajes principales) con quienes tengo que convivir toda la película y hay una cuestión de respeto a la sensibilidad y de un amor a la vida”, explicó.
Por momentos, parece que la película es un cruce entre el documental y la ficción.
“Fue así para mí, al interpretar a un personaje y al mismo tiempo sensibilizarme con personas que no entendían nada de la actuación, ni de la creación del personaje, pero que a la vez estaban actuando algo que no era ellos. Tras finalizar las tomas, eran personas solas, tristes, abandonadas pero al mismo tiempo con un amor a la vida, lo que a mí me hizo revalorar muchas cosas de mi propia existencia”, comentó el actor.
Francisco Barreiro refirió que como mexicano era un orgullo estar en un festival tan importante como el de Beijing y más participar en la selección oficial.
El Festival
Tras cinco ediciones, el Festival Internacional de Cine de Beijing se ha consolidado como una plataforma para la promoción y el desarrollo de la industria cinematográfica en China a través del intercambio y cooperación con el extranjero.
Este año se adaptó el lema “Compartir la pantalla forma el futuro”.
Desde su fundación, el festival ha proyectado más de mil películas chinas y extranjeras, se han realizado 13 foros sobre diversos temas de la industria cinematográfica.
Este certamen consta de siete secciones: Premio Tiantan, Beijing Film Panorama, Theme Forum, Beijing Film Market, Film Carnival y la Ceremonia de apertura y clausura, entre otros eventos relacionados.